¿Ha llegado la hora del coche eléctrico?
Los productos ecológicos, el coche eléctrico en alguna medida lo es, presentan mejor imagen que los que no lo son y cada vez logran mejores ventas, además las Administraciones apuestan por ellos concediendo subvenciones y demás ayudas. Eso sí, no podemos olvidar el debate sobre cuánto de ecológico es un coche eléctrico con todas las cuestiones sobre producción de baterías, reciclaje de las “pilas”, etc.
En nuestro blog de snovit abordamos la cuestión de la idoneidad de un vehículo de esas características. La realidad es que cada día se ven más por las carreteras. ¿Es su momento?
Tipos de “coches eléctricos”
Mild Hybrid: Son los habituales de gasolina, gasoil, gas licuado, que están parcialmente electrificados.
Híbridos: Los que tienen combinados el motor térmico (gasolina, gasoil o gas) con los motor eléctrico.
Híbridos enchufables (o PHEV): funcionan como los híbridos anteriores o como los 100% eléctricos, sólo con electricidad.
Eléctricos con autonomía extendida: Funcionan con motor eléctrico, pero cuando se te agota la batería entra en marcha un motor térmico unos kilómetros hasta encontrar un lugar para enchufar el coche a la red eléctrica.
Eléctricos puros (plug-in o 100% enchufables): Son los que solo funcionan con energía eléctrica y se recargan con corriente alterna y/o continua o con lo que se genere de las frenadas.
¿Es el momento del coche eléctrico?
Y abordamos la respuesta de la pregunta de nuestro titular, ¿llega la hora del coche eléctrico? ¿Es buena idea adquirirlo hoy en día?
Para empezar habrá que echar mano de la calculadora, ojo, siempre hablamos del coche eléctrico puro. Tendremos en cuenta:
1. El precio: Todavía su producción no es muy alta con lo que determina que el precio para el usuario final sea alto con respecto a un vehículo tradicional. Dependiendo del modelo, son entre 5.000 y 15.000 euros más caros (incluidas ayudas). En la publicación Xataka disponen de una guía actualizada para saber si sale rentable comprarlo o no.
2. Ayudas: Pueden ser del propio fabricante o de la Administración. Habrá que enterarse bien a cuáles podemos acogernos en estos momentos provenientes del Estado, Comunidades Autónomas e incluso Ayuntamientos.
3. Kilometraje: Teniendo en cuenta lo anterior debemos tener una previsión de los kilómetros que vamos a realizar y hacer cálculos, porque igual sí que merece la pena pagar más de manera inicial porque a la larga el consumo eléctrico será más barato que el del carburante habitual. En estos momentos un coche eléctrico no es para utilizarlo en pocos momentos.
4. Gastos fijos: Sobre todo con el tema de las baterías, porque algunos modelos las alquilan o se pagan aparte, más luego todo el tema de mantenimiento o posibles averías.
5. Mantenimiento: En teoría el coche eléctrico es menos complejo de mantener o reparar que el tradicional, se habla de un ahorro de un 25% con respecto al de un vehículo convencional, lo que puede suponer más de 2.000 euros a lo largo de 10 años y 200.000 kilómetro
6. Consumo: Calcular con la tarifa eléctrica que exista en cada momento el coste por kilómetro teniendo en cuenta los trayectos cotidianos. Hay estudios que determinan que 100 kilómetros en un coche eléctrico cuesta 1,30 euros, mientras que en uno de gasolina, 6,5 euros: cinco veces más
7. Red de recarga: Tendrás que tener en cuenta si dispones de ellos cerca de casa o vas a instalar uno en tu propiedad. Entérate si en el trabajo tienes alguno de estos postes de repostaje eléctrico. Para irnos de vacaciones una semana tendremos que diseñar bien la ruta para poder recargar las baterías sin sobresaltos.
8. Ventajas para circular y aparcar: Ya sabemos que en las grandes ciudades cada vez se veta más a la circulación del vehículo tradicional (carriles especiales), e incluso hay autopistas donde circula gratis o con tarifa rebajada, eso también lo tendremos en cuenta, al igual que las ventajas para aparcar porque el coche eléctrico tendrá prioridad en las zonas de parqueo, incluso será más barato
9. Depreciación: Todavía no se conocen datos certeros sobre el envejecimiento de este tipo de vehículos, sobre todo la vida útil de las baterías. Igual hay que tener en cuenta la opción de renting más que la de compra.
Por resumir, existen estudios que apuntan que un coche eléctrico, con respecto a uno similar de carburante, comienza a salir rentable a partir de circular 20.000 kilómetros al año.
Una vez que has analizado toda esta información es el momento de decidir sobre si compensa adquirir un coche eléctrico o comprar, todavía, uno tradicional.